Amigos de la lista:

Les remito un texto que bien resume
el curso de los acontecimientos en las
ultimas semanas de enfrentamientos
entre indigenas y gobierno. La nota es
de Bolivi@press.

Un saludo

Alex Condori


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CUARTO INTERMEDIO EN LA CONFRONTACIÓN CAMPESINOS-GOBIERNO
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EL CURSO DE LOS HECHOS (En las pasadas dos semanas)

Los hechos anotados en el anterior boletín se siguieron desarrollando con
más y más fuerza. El día 10 el Mallku comparece ante la PTJ y monta una
soberbia escena publicitaria declarándose inocente de todo. El día 11,
mientras el ministro de Asuntos Indígenas (nombrado por el propio Mallku)
proclama que "el pliego de Felipe Quispe es inviable" y lo
acusa de tener "intenciones políticas", comunarios de las provincias
Bautista Saavedra y Muñecas empiezan a sumarse masivamente al bloqueo. En
Achacachi el Mallku decreta el acceso selectivo de la prensa y los
campesinos, suspicaces y tensos, agreden verbal y físicamente a periodistas.
Por su parte al ministro de Gobierno sólo se le ocurre dar un ultimátum de
48 horas y "asume la responsabilidad" por las eventuales
muertes que el enfrentamiento pueda costar, esplegando para ello tropas
armadas, e incluso las tanquetas de funesto recuerdo. La prensa llega a
diagramar los "escenarios del enfrentamiento" en el convulsionado altiplano
paceño, previstos para la tarde del día 13.

El día 13 la prensa publica la proclamación de un gobierno autónomo del
Pueblo Aymara de Umasuyu que había sido difundida por Internet. La COB
proclama su apoyo a los campesinos, mientras representantes de la Iglesia y
de la Asamblea de Derechos Humanos claman por la paz y se desplazan a
Achacachi para "facilitarla". Según el Presidente de la Asamblea, son más de
25 mil las personas que él ha visto movilizadas en los caminos del
Altiplano. Por su parte las unidades militares reciben órdenes y
contraórdenes. Los ánimos se caldean de hora en hora: hay buses y camiones
apedreados, y cuando los campesinos interceptan al director del hospital de
Achacachi que utilizaba la ambulancia para transportar quesos a la ciudad,
llegan a golpearlo; el gobierno decide cerrar el hospital, provocando la
protesta general (incluso la del alcalde y el párroco). Los campesinos
declaran "estado de sitio" en todo el territorio aymara y se proclaman
dispuestos a morir.

Afortunadamente el presidente de la república interino (Leopoldo Fernández,
presidente del Senado) convoca a una reunión de gabinete, con presencia de
las fuerzas militares y policiales, y ordena la cancelación
del operativo militar, evitando así el sangriento enfrentamiento. Este hecho
le permite al Mallku distinguir en el gobierno dos tendencias: la de
Fernández, proclive al diálogo, y la "radical y sanguinaria" del triunvirato
Fortún-Kempff-Pérez. Pero no deja de haber enfrentamientos con el Ejército
(con un total de ocho heridos durante los días 14 y 15).

El día 16, y mientras el diálogo no avanza, los bloqueos sí lo hacen y por
momentos llegan a cortar la comunicación entre La Paz y El Alto, con la
ayuda de universitarios y pobladores de dicha ciudad. La Coordinadora de
Cochabamba y los cocaleros de Yungas y el Chapare amenazan con unirse a los
campesinos aymaras, y se teme la extensión del conflicto a todo el país. El
día 18 los bloqueos cortan el tráfico entre La Paz y Oruro, bloqueos que son
violentamente levantados por un millar de efectivos militares y
policiales: campesinos heridos y 62 detenidos, buses rotos, choferes
golpeados, son los saldos de la violencia.

El mismo día se presentan sorpresivamente en conferencia de prensa cuatro
dirigentes importantes que firman una declaración de unidad y demandas
comunes: Felipe Quispe, Evo Morales, Oscar Olivera (Coordinadora del Agua) y
Dionisio Núñez (cocaleros de Yungas). Ante la amenaza que esto supone,
nmediatamente el gobierno hace llegar una propuesta de acuerdo que consiste
en levantamiento de los bloqueos, repliegue de las fuerzas militares,
liberación de detenidos, desistimiento de la demanda judicial
contra Felipe Quispe, garantías para los dirigentes e investigación de las
muertes campesinas, e instalación inmediata de mesas de diálogo. Sin embargo
el día 19 la firma del convenio fracasa por impuntualidad de los
representantes de gobierno y por la bronca acumulada de los campesinos
presentes en la sede de la Federación Departamental de Campesinos de La Paz.
Por fin el día 20 se llegó a firmar el acuerdo, que en el fondo no es otra
cosa que un cuarto intermedio de diez días, con la esperanza de que en ese
plazo se llegue a acuerdos de contenido. (De Noticias Comentadas, CEDIB
Bolivi@press)

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Lista de discusión Aymara 

http://aymara.org/lista/lista.html
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