Es de vital importancia que se de una situación de control y acomodo de los usuarios en las bibliotecas, pues son un lugar donde la cultura y el acceso a la lectura no ha de estar vetado a ningún tipo de usuario que lo requiera. Sin embargo hablamos de una biblioteca universitaria, y en cuanto a tal sus medios de vigilancia deberían estar más fortalecidos, pues debe existir una restricción a su uso por los invitados no universitarios. Es indispensable la seguridad en un centro público, sin embargo las bibliotecas manipulan numerosos gastos que no pueden hipotecar en la contratación de vigilantes de seguridad privados. Como institución pública requiere de una asistencia de los organismo públicos. Y, en mi opinión, la actuación de los cuerpos de seguridad del Estado tienen la responsabilidad de intervenir.
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