Estupor europeo ante el "reparto de papeles" de Bush en seguridad
mundial 

BRUSELAS. Alberto Sotillo corresponsal 

Cunde la inquietud entre los europeos tras las declaraciones de
George W. Bush en las que el candidato republicano aboga por un
reparto de papeles en el que EE.UU. se ocuparía de los grandes
conflictos estratégicos y Europa, de operaciones de paz como las de
los Balcanes. Es la ineluctable desazón que siente Europa cada vez
que Washington deja de cortejarla.


George W. Bush. Reuters

Ante las grandes crisis del viejo continente como la de los Balcanes,
el presidente Clinton ha actuado como un convencido europeo. "Clinton
ha sido el presidente más "europeo" que ha tenido Estados Unidos
desde Roosevelt", afirmó una fuente de la UE. Asunto aparte han sido
las permanentes agarradas comerciales. Pero el caso es que, tras el
europeísmo fundamental de Clinton, han causado estupor la "nueva
división del trabajo" propuesta por Bush, en la que Europa se haría
cargo de operaciones de paz regionales, mientras Estados Unidos se
ocuparía de conflictos estratégicos como una crisis en el Golfo
Pérsico o en Taiwán.

Los europeos ya dan por entendido que una crisis en el Golfo Pérsico
o en Taiwán correrá de parte de Washington. Pero, a la vez, les
produce una profunda tranquilidad el actual juego en el que Estados
Unidos intenta meter cabeza en la UE a través de los planes europeos
de Defensa, al tiempo que los Quince hacen como que paran los pies a
los norteamericanos y les advierten de que éste es un plan del viejo
continente que no puede estar fiscalizado por Washington. Nada
infunde tanta seguridad a Europa como que Estados Unidos la siga
cortejando.

LA OTAN, VACÍA DE CONTENIDO

Las fuentes más entusiastas con la creación de la defensa europea
señalan con optimismo que las declaraciones de Bush son en realidad
una profesión de fe y confianza en la UE, ya que anima a los europeos
a que se hagan cargo de todos sus proyectos de Defensa. Sin embargo,
los más amigos de mantener a Estados Unidos en la casa europea temen
que "la división de tareas" debilite el vínculo transatlántico y, a
largo plazo, vacíe de contenido una OTAN en la que Washington se
desentiende de las operaciones que más interesan a los europeos.

En la Alianza, no obstante, la doctrina oficial insiste en que "jamás
podrá Estados Unidos desentenderse de la OTAN". La reflexión de Bush
no es nueva en las relaciones trasatlánticas e incluso ha emergido en
el europeísta mandato de Clinton. El desagradecido retiro del antiguo
jefe de las tropas de la Alianza, general Wesley Clark, después de
que éste ganara la guerra de Kosovo ‹en la que el militar
norteamericano se comprometió más que los propios europeos‹ fue una
clara señal de que Estados Unidos no va a dejarse embarcar fácilmente
en más operaciones de paz como la de los Balcanes. 

Curiosamente fue en ese instante en el que los europeos se
convencieron de que no les quedaba más remedio que organizar sus
fuerzas de paz.

Las declaraciones de Bush han coincidido, además, con un momento en
el que avanza a trancas y barrancas la negociación sobre las fórmulas
de coordinación entre la UE y la OTAN en una futura operación de paz.
Aunque, en buena parte, las dificultades no proceden ni de la UE ni
de Estados Unidos, sino de Turquía, que quiere forzar la ocasión para
participar de pleno en la política exterior y de defensa de la UE. El
caso es que fuentes aliadas señalan que, para el próximo mes de
diciembre, se espera que se pueda perfilar más o menos el proyecto,
pero que se ve muy difícil que haya un acuerdo para entonces.

A estas complicaciones puntuales, sin embargo, no se les da mayor
importancia. Es más, fuentes de la UE se muestran receptivas a las
propuesta del secretario de Defensa norteamericano, William Cohen, de
que la Unión y la OTAN compartan su planificación militar. La oferta
puede ser vista como un intento de Estados Unidos por introducirse en
un proyecto europeo. Pero en la UE más bien se tiende a pensar que el
plan es "muy interesante" no sólo para operaciones de la Unión en las
que participe la OTAN, sino incluso también para operaciones
específicamente europeas. Y recuerdan a este respecto que la
planificación militar de la OTAN está abierta no sólo a los aliados,
sino también a todos los países del Este que participan en el
dilatado club de la Asociación por la Paz.

EE.UU. EN LOS BALCANES

Para preservar este juego de frenos y complicidades en sus
relaciones, la UE necesita que Estados Unidos la siga cortejando. En
la actualidad, más de un 80 por ciento de las tropas aliadas en los
Balcanes son europeas, pero también da seguridad saber que, por el
momento, también hay norteamericanos en la operación. Aunque también
es cierto que los más fuertes reproches al plan de Bush han venido de
la Prensa norteamericana, que señala que resulta absurdo dividir la
seguridad mundial en operaciones de paz y grandes conflictos
estratégicos.

Néstor Miguel Gorojovsky
[EMAIL PROTECTED]

_______________________________________________
Leninist-International mailing list
[EMAIL PROTECTED]
To change your options or unsubscribe go to:
http://lists.wwpublish.com/mailman/listinfo/leninist-international

Reply via email to