El software privativo es inmoral.
Recomendaría usar la palabra «antiético». «Moral» e «inmoral»
describen más bien las acciones humanas. El software no es una acción, y
podría confundirse con «usar software privativo es inmoral», lo cual es
incorrecto. Usar software privativo no es inmoral, pero crearlo y promoverlo
sí lo es. Si usas software privativo solo te conviertes en víctima.
Otra cosa: no pretendamos tapar el sol con un dedo. Hay programas que no
tienen reemplazos libres o bien tienen alternativas libres que no llegan al
nivel para reemplazarlos porque son técnicamente insuficientes. Otros, como
yo, sufrimos con computadoras que requieren algún blob para funcionar
correctamente. En el mundo real no todo se soluciona con «no uses ese
programa» o «compra otra computadora».
Uno de los objetivos del foro debería ser brindar consejo a aquellos
usuarios que por X o Y razón no pueden dejar de usar una pieza de software
privativo para que puedan realizar su informática perdiendo en el menor
grado posible su libertad. Si bien el simple hecho de ejecutar un programa
privativo te hace perder tu libertad, es posible hacerlo perdiendo la menor
cantidad de libertad posible.
Por ejemplo, es mejor ejecutar Microsoft Office en Trisquel usando Wine, que
hacerlo desde Güindous 10. Otro ejemplo: si tu computadora requiere algún
controlador privativo para funcionar, es mejor usar un SO libre e instalar
específicamente dicho controlador, que usar Ubuntu lleno de blobs.
El mismo Stallman ha admitido que aunque la idea del movimiento no es usar
programas privativos en un SO libre, es mejor ejecutar dichos programas en un
SO libre que en uno privativo. Stallman lo ha descrito como «ir hacia el
horizonte en sentido diagonal, no directamente». Además, en los inicios del
sistema GNU, los componentes debían probarse en Unix (privativo), porque no
existía un SO libre en el cual probar programas libres.
Siempre hay que proponer el uso de software libre e insistir con nuestro
mejores estrategias y argumentos. Pero si la persona no puede realizar el
cambio por las razones que él o ella considere válidas, no hay porqué
presionarle demasiado. Citando a Stallman: «annoying them is not the way to
convince them» (*). Se le debe dejar claro a la persona que nosotros no
consentimos que él o ella use software privativo, pero no tratarlo
bruscamente con «vete con tus posts a otro lado». Trataremos de guiar a la
persona en su conversión al software libre (sí, suena como culto
religioso...), pero se hará de forma amable y en tantos pasos sean
necesarios para que la persona lo asimile, incluso si se hace de a pasos
pequeños y demorados. Es mejor llegar en 50 años que no llegar nunca.
(*) https://stallman.org/stallman-computing.html