LECTURAS INTERESANTES Nº 152
  Remite: [EMAIL PROTECTED]   [EMAIL PROTECTED]
   
  AREQUIPA PERU                                              2 DICIEMBRE 2006
  _______________________________________________________________________
  Preservaremos al precio que sea necesario la libertad del pueblo cubano y la 
independencia y soberanía de la Patria
  DISCURSO PRONUNCIADO POR EL SEGUNDO SECRETARIO DEL COMITÉ CENTRAL DEL 
PARTIDO, PRIMER VICEPRESIDENTE DE LOS CONSEJOS DE ESTADO Y DE MINISTROS, 
MINISTRO DE LAS FUERZAS ARMADAS REVOLUCIONARIAS, GENERAL DE EJÉRCITO RAÚL 
CASTRO RUZ, EN EL ACTO POLÍTICO, LA REVISTA MILITAR Y LA MARCHA DEL PUEBLO 
COMBATIENTE, EN OCASIÓN DEL ANIVERSARIO 50 DEL DESEMBARCO DE LOS 
EXPEDICIONARIOS DEL YATE GRANMA, DEL DIA DE LAS FAR Y DE LA CELEBRACIÓN DEL 80 
CUMPLEAÑOS DEL COMANDANTE EN JEFE FIDEL CASTRO RUZ, REALIZADOS EL 2 DE 
DICIEMBRE DE 2006 "AÑO DE LA REVOLUCIÓN ENERGÉTICA EN CUBA".
  Compañeras y compañeros, 
  Combatientes de ayer, hoy y siempre:
  Saludamos la presencia de entrañables amigos de la Revolución Cubana, que nos 
han brindado su apoyo y solidaridad indispensables a lo largo de los últimos 50 
años de esta larga lucha por la soberanía y la libertad. Deseo mencionar entre 
ellos a los representantes de la Fundación Guayasamín y a los familiares de ese 
gran amigo y pintor ecuatoriano, que concibieron el noble gesto de homenajear 
al compañero Fidel en su cumpleaños 80, ocasión que ha congregado en La Habana 
a Jefes de Estado o de Gobierno, así como otros altos dignatarios y 
personalidades de la vida política y cultural de diversos países a quienes 
agradecemos a nombre de nuestro pueblo el honor de acompañamos en esta tribuna.
  Nos reúne hoy aquí, además, la celebración de un acontecimiento trascendental 
de nuestra historia. Conmemoramos el quincuagésimo aniversario del desembarco 
del Granma el dos de diciembre de 1956, fecha que marca el nacimiento del 
Ejército Rebelde y de sus genuinas sucesoras: las Fuerzas Armadas 
Revolucionarias.
  Al pueblo combatiente, protagonista heroico y sustento legítimo de las 
Fuerzas Armadas y a su fundador y Comandante en Jefe está dedicada la Revista 
Militar, que simboliza en los bloques que desfilarán la secuencia de la hermosa 
historia de 138 años de lucha del pueblo cubano por su definitiva 
independencia, primero: el ejército mambí contra el yugo colonial, después: el 
ejército rebelde contra la tiranía neocolonial y ahora: las Fuerzas Armadas 
Revolucionarias en defensa de la Patria, la Revolución y el Socialismo. El 
mismo ejército del pueblo en tres etapas históricas diferentes.
  La ocasión es propicia para reafirmar la plena vigencia de las palabras del 
compañero Fidel en el Informe Central al Primer Congreso del Partido, hace ya 
31 años, cuando expresó:
  "El Ejército Rebelde fue el alma de la Revolución. De sus armas victoriosas 
emergió libre, hermosa, pujante e invencible la patria nueva. Sus soldados 
reivindicaron la sangre generosa vertida en todas las contiendas por la 
independencia y con la suya propia cimentaron el presente socialista de Cuba. 
Las armas arrebatadas a los opresores en épica lucha las entregaron al pueblo y 
con el pueblo se fundieron, para ser desde entonces y para siempre el pueblo 
armado".
  Cuando"... no existía todavía (...) el Partido que nacería después, el 
Ejército fue factor de cohesión y unidad de todo el pueblo y garantizó el poder 
de los trabajadores y la existencia de la Revolución..."
  Y "... Cuando se fundó el Partido, vanguardia de nuestra clase obrera, 
símbolo y síntesis de los ideales, las aspiraciones y la historia de la 
Revolución cubana desde los días gloriosos de La Demajagua hasta hoy, 
continuador de la obra del Partido Revolucionario de Martí y de los intrépidos 
fundadores del primer Partido marxista leninista" de Cuba, nuestro Ejército, 
heredero a su vez del heroísmo y la pureza patriótica del Ejército Libertador y 
continuador victorioso de sus luchas, depositó en sus manos las banderas de la 
Revolución y fue a partir de ese instante y para siempre su más fiel, 
disciplinado, humilde e inconmovible seguidor". Hasta aquí las palabras de 
Fidel.
  También en el marco del 50 Aniversario de las FAR es pertinente ratificar la 
unidad monolítica de Pueblo, Ejército y Partido; esa unidad que echó raíces muy 
profundas a lo largo de los años transcurridos desde el triunfo revolucionario 
el 1ro de enero de 1959; esa unidad que es nuestra principal arma estratégica, 
que ha permitido a esta pequeña isla resistir y vencer tantas agresiones del 
imperialismo y sus aliados; esa unidad que sustenta la vocación 
internacionalista del pueblo cubano y que explica la proeza de sus hijos en 
otras tierras del mundo, siguiendo la máxima martiana de que Patria es 
Humanidad. 
  Vivimos un momento excepcional de la historia. A muchos les pareció que la 
caída del campo socialista y la desintegración de la Unión Soviética 
representaba la derrota definitiva del movimiento revolucionario internacional, 
algunos se aventuraron a sugerirnos el abandono de los ideales a los que 
generaciones enteras de cubanos habían dedicado sus vidas, mientras que el 
gobierno norteamericano, con el oportunismo que lo caracteriza, iniciaba en los 
últimos años una escalada sin precedentes de hostilidad y agresividad contra 
Cuba en la esperanza de asfixiar económicamente al país y derrocar a la 
Revolución mediante la intensificación de la labor subversiva. En tal sentido, 
grande ha sido la sorpresa y la frustración para nuestros enemigos y mucho más 
grande la admiración de las mayorías oprimidas al presenciar el ejemplo de 
firmeza, ecuanimidad, madurez y confianza en sí mismo que ha dado nuestro 
pueblo en los últimos cuatro meses.
  A pesar de las maniobras y presiones de Estados Unidos y sus aliados, el 
prestigio internacional de Cuba se ha fortalecido, prueba de ello fue la 
realización exitosa en esta capital de la décimo cuarta Conferencia Cumbre del 
Movimiento de Países No Alineados el pasado mes de septiembre y más 
recientemente, el récord de apoyo alcanzado en la Asamblea General de Naciones 
Unidas a la resolución de condena al bloqueo norteamericano contra nuestro país.
  En América Latina, la aplicación de las recetas neoliberales impuestas por 
Estados Unidos y sus socios europeos ha conducido al continente a la triste 
condición de ser la región del planeta donde resulta más insultante y oprobiosa 
la opulencia de la oligarquía estrechamente vinculada con el capital extranjero 
frente a la pobreza, insalubridad e ignorancia en que vive la mayoría de la 
población. Los pueblos latinoamericanos, de manera progresiva en los últimos 
tiempos, han expresado su indignación y repudio ante las políticas entreguistas 
y de subordinación al imperio de los gobiernos y partidos tradicionales. Los 
movimientos populares y revolucionarios se robustecen y a pesar de las 
multimillonarias campañas de desinformación, el chantaje y la injerencia 
descarada de Washington; nuevos y experimentados líderes asumen la conducción 
de sus naciones.
  La anexión económica de América Latina por parte de Estados Unidos a través 
del ALCA fue derrotada, en su lugar surge para beneficio de las masas 
desposeídas el proyecto integrador de la Alternativa Bolivariana para las 
Américas, ALBA, propuesta por el Presidente y hermano, Hugo Chávez.
  Recientes acontecimientos en la arena internacional atestiguan el fracaso de 
las políticas aventureras de la actual administración norteamericana. El pueblo 
de ese país demostró en las urnas el pasado 7 de noviembre su rechazo al 
concepto estratégico de la guerra preventiva, el uso de la mentira para 
justificar intervenciones militares, la utilización del secuestro y las 
prisiones clandestinas, así como la despreciable legalización del empleo de 
métodos de tortura en la llamada guerra contra el terrorismo.
  A tres años y siete meses de la eufórica y precipitada declaración de "misión 
cumplida" en Irak por parte del Presidente Bush a bordo de un portaaviones, 
continúan llegando a Estados Unidos los cadáveres de jóvenes soldados 
norteamericanos, caídos en una guerra motivada por el dominio de los recursos 
energéticos de la región. Nadie se atreve ya a pronosticar su fin. El gobierno 
de Estados Unidos se encuentra ante una encrucijada sin salida: por una parte 
comprende que no puede prolongar la ocupación del país y al propio tiempo, 
admite que no tiene creadas las condiciones mínimas para abandonarlo dejando 
sus intereses asegurados, a la vez que crece indetenible la cifra de muertos y 
mutilados entre la población, sumida en una guerra civil como consecuencia de 
la anarquía y el desgobierno que generó la invasión norteamericana.
  Algunos en los Estados Unidos plantean ahora simplemente retirarse del caos 
creado por ellos mismos. Desconocemos qué harán en ese caso con la OTAN, 
embarcada por sus socios norteamericanos en el conflicto afgano, que también se 
torna cada vez más inmanejable y peligroso.
  A los ojos de todo el mundo, la llamada "cruzada contra el terrorismo" se 
encamina inexorablemente a una derrota humillante.
  El pueblo norteamericano, al igual que hizo en Vietnam, pondrá fin a estas 
guerras injustas y criminales. Esperamos que las autoridades de los Estados 
Unidos aprendan la lección de que la guerra no es la solución a los crecientes 
problemas del planeta; que proclamar el derecho de atacar irresponsablemente a 
"sesenta o más oscuros rincones" del mundo, aún cuando ya están empantanados en 
dos de ellos, hace más complejas y profundas las diferencias con el resto de 
los países; que el poder basado en la intimidación y el terror no pasará nunca 
de ser una ilusión efímera y sus terribles consecuencias para los pueblos, 
incluyendo el norteamericano, están a la vista.
  Estamos convencidos de que la salida a los acuciantes conflictos que enfrenta 
la Humanidad no está en las guerras, sino en las soluciones políticas. Sirva la 
oportunidad para nuevamente declarar nuestra disposición de resolver en la mesa 
de negociaciones el prolongado diferendo entre Estados Unidos y Cuba, claro 
está, siempre que acepten, como ya dijimos en otra ocasión, nuestra condición 
de país que no tolera sombras a su independencia y sobre la base de los 
principios de igualdad, reciprocidad, no injerencia y respeto mutuo.
  Mientras tanto, después de casi medio siglo, estamos dispuestos a esperar 
pacientemente el momento en que se imponga el sentido común en la conducta de 
los círculos del poder en Washington.
  Con independencia de ello, proseguiremos consolidando la invulnerabilidad 
militar de la nación sobre la base de la concepción estratégica de la Guerra de 
Todo el Pueblo, cuya planificación e introducción iniciamos hace 25 años. Este 
tipo de guerra popular, como ya se ha demostrado de modo reiterado en la 
historia contemporánea, es sencillamente imbatible.
  Continuaremos elevando la preparación y cohesión combativa de las tropas 
regulares y sus reservas, de las Milicias de Tropas Territoriales, las Brigadas 
de Producción y Defensa y los demás elementos del dispositivo defensivo 
territorial, incluyendo las estructuras partidistas, estatales y 
gubernamentales en todos los niveles. Seguiremos acondicionando el Teatro de 
Operaciones Militares a la vez que desarrollamos las comunicaciones y la 
modernización de los medios de combate como vía para elevar sus cualidades 
combativas y hacerlas corresponder con el empleo previsto en caso de una 
agresión.
  De la misma forma, continuaremos fortaleciendo en todos los frentes la 
importante labor que realizan los abnegados combatientes del Ministerio del 
Interior.
  Preservaremos al precio que sea necesario la libertad del pueblo cubano y la 
independencia y soberanía de la Patria.
  Con la fuerza que emana de sus centenarias luchas y con el vigor patriótico 
que caracteriza a nuestro pueblo, noble y heroico, unamos nuestras voces al 
exclamar:
  ¡Viva Fidel!
    ¡Viva Cuba libre!


                
---------------------------------

LLama Gratis a cualquier PC del Mundo.
Llamadas a fijos y móviles desde 1 céntimo por minuto.
http://es.voice.yahoo.com

[Non-text portions of this message have been removed]

Responder a